13 Feb Destino o voluntad, ¿qué lo define?
¿Nuestras vidas dependen según nuestro destino o la elección de nuestros actos? ¿Somos el resultado de nuestras capacidades innatas o más bien de nuestro esfuerzo para desarrollar nuestro potencial? ¿Nacemos tal quien somos o podemos convertirnos en quienes queramos ser?
Mucho se ha dicho acerca de la naturaleza de nuestra personalidad y, siempre ha sido tema de un gran debate en la psicología. No hay duda de que los seres humanos somos realmente una combinación de nuestra composición genética (ADN) y de nuestro entorno (las experiencias personales).
No podemos negar el hecho de que ciertos rasgos y habilidades son heredados y, que algunas personas tienen la suerte de haber nacido con talentos especiales, mientras que otros no. Supongo que no hay mucho que podamos hacer sobre ciertos aspectos en la vida que sólo son la forma en que son; sin embargo, tenemos una opción en cuanto a lo que hacemos con lo que heredamos.
Creo que fue Voltaire quien dijo que debemos aceptar la vida con las cartas que nos reparte, pero una vez que estas están en nuestras manos, solo tenemos que decidir cómo jugar con ellas para ganar el juego. Depende de cada uno de nosotros decidir si sub-utilizamos o maximizamos las cartas que tenemos. Podemos decidir vernos condenados por factores innatos desde nuestro nacimiento o podemos optar por vernos como en un reino de infinitas posibilidades de crecer y desarrollarnos.
“Nuestra mentalidad es el punto de inflexión que finalmente determina a quién nos convertimos”.
Soy de la opinión, de que el éxito depende en gran medida de tener una mentalidad de crecimiento y en lugar de pensar que nuestras cualidades están talladas en piedra, debemos creer que ser cultivadas a través de nuestros esfuerzos.
“Si creemos que la vida se trata de aprender, nos daremos cuenta de que vivir consiste en desafiarnos a nuevas experiencias que nos ayudarán a alcanzar todo nuestro potencial”.
Entrenar nuestras mentes para superar nuestros límites nos permite descubrir todo lo que podemos ser. Está dentro del poder de cada uno de nosotros crear un ambiente que contribuya a nuestro óptimo desarrollo y autorrealización. Las habilidades no sólo son heredadas, sino adquiridas, y todos sin excepción, podemos evolucionar.
Las creencias son los bloques de construcción de nuestras vidas y gran parte de lo que somos, es el resultado de quienes creemos que somos, en lo que pensamos y en que nos convertimos. Así que no permitas que el miedo te dicte quién eres y te diga lo que nunca serás.
Tú puedes creer que no naciste con lo que se necesita o que lo que eres ahora es todo lo que puede ser, pero la verdad es que no lo puedes saber ciertamente hasta que lo intentes y, quiero decir realmente intentarlo, asegurándote que haces, es lo mejor que puedes hacer. Puedes atreverte a tomar riesgos y trabajar duro para convertirte en quien quieres ser o, simplemente puedes conformarte y tomar lo que la vida te ofrece. Puedes dejar que el destino y la genética te definan o puedes hacerte responsable de desarrollar lo mejor que puedes ser.
“Al final del día, la decisión es tuya, y no hay destino en eso”.
Sorry, the comment form is closed at this time.