25 Mar Un pastel de chocolate en nuestra dieta
La vida es como un pastel de chocolate; sabes que te encanta comerlo pero sabes que no debes.
Pero no todos los ingredientes de una receta de “tarta chocolate” son agradables al paladar.
- La harina es seca y desagradable
- El cacao es amargo
- La sal es intragable
- El azúcar es demasiado dulce
- La esencia de vainilla es demasiado fuerte
- La leche, no a todo el mundo le sienta bien
- El aceite vegetal es casi imposible de tragar
- De los huevos si abusamos, harán que nos suba el colesterol
- La mantequilla sola es difícil de tragar si no le untamos un poco en pan
Ahora bien, con cuidado y combinado en las etapas adecuadas todos estos productos producen un “pastel” perfecto.
Pues en la vida normal fuera de las cocinas, los seres humanos también tenemos relaciones o tentaciones que parecen dulces y, a menudo nos dejan con un regusto amargo.
La vida está llena de pruebas y ensayos, pero lo que se debe tener en cuenta es que hay un mundo mucho más grande al cual podemos acceder. Todos miramos a corto plazo y en ocasiones, incluso nos aferramos a los ingredientes negativos en el proceso, como la sal y el polvo de cacao; no entendemos que esto no será más que una lección más, que nos ayudará a entender lo que es mejor para nosotros.
Podemos optar por quejarnos y lamentarnos de las situaciones desagradables que hemos experimentado, o podemos esperar la llegada del “espíritu santo” que nos salve de esta “receta”, pero lo mejor y lo verdaderamente rico, es que cada uno de nosotros elaboremos nuestro propio pastel; con paciencia y mano, pero,sobre todo,hay que cocinar con mucho amor.
Y la buena noticia, es que este pastel está libre de calorías…
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